Karen Horney y el Psicoanálisis

Karen Horney (1885-1952) fue una gran medico alemana y primera gran personalidad teórica feminista, discípula de Freud a pesar de no partir de los principales planteamientos que él proponía,  se centró en los planteamientos freudianos que consideró contenían un sesgo de género.

Horney fue juzgaba por el concepto de la envidia del pene como uno de los planteamientos más erróneos de Freud; ella planteaba que el sentimiento de inferioridad de las mujeres no deriva de su anatomía, sino de su excesiva dependencia de los hombres, que padres, madres y la sociedad impusieron en ellas desde temprana edad. De modo similar, se oponía a la teoría del “Complejo de Edipo” basándose en que no es universal y en algunos casos puede evitarse. Por lo cual se le da el  nombre a lo que hoy en día se conoce como su  término Feminista.

La propuesta de Karen  Horney es considerada en términos de fonética como Machismo, sin embargo este término está referido al movimiento social, cultural o ideológico que busca la igualdad entre hombres y mujeres; a diferencia del “Hembrismo” que busca imponerse sobre el género masculino. Las teorías feministas de la construcción del género basadas en las relaciones objétales han generado estudios sobre la personalidad e identidades masculinas desde las teorías masculinas pro-feministas que también han empezado a teorizar sobre las diferentes masculinidades que crean las diferencias de raza, étnicas y de clase.  

Horney juzgaba el concepto de la “envidia del pene” como uno de los planteamientos más erróneos de Freud; porque ella planteaba que el sentimiento de inferioridad de las mujeres no deriva de su anatomía, sino de su excesiva dependencia de los hombres, que padres, madres y la sociedad impusieron en ellas desde temprana edad. De modo similar, se oponía a la teoría del “Complejo de Edipo” basándose en que no es universal y en algunos casos puede evitarse.

Horney desarrolló una teoría que constituye una elaboración teórica alternativa a los postulados freudianos. Destaco también por su teoría de la personalidad, en la que considera al individuo de forma holística, como una unidad dentro de un marco social, influyendo y siendo influido por su ambiente. Así, según esta autora, la personalidad consiste en atributos que caracterizan a la organización constantemente cambiante del individuo. Cada atributo es creado por el individuo y actúa simultáneamente sobre él, exigiendo satisfacción, produciendo esfuerzo o presionando a la actuación.

Horney decía que los atributos son aprendidos en la familia. Por lo que hace énfasis en la teoría, los factores motivacionales derivan de los atributos de la personalidad más que de los esfuerzos libidinales infantiles conservados desde la infancia por compulsión a la repetición. Destaca también su teoría psicopatológica y dentro de ésta la génesis del conflicto y la ansiedad, las defensas caracterízales contra las defensas neuróticas y la formación de síntomas.